1. Dedica unos momentos cada día para reflexionar sobre el tipo de
relación que quieres contigo mismo y con los demás.
2. Recuerda que todos los seres humanos tienen las mismas necesidades.
3. Observa tus intenciones para descubrir si estás tan interesado en las
necesidades de los demás como en las tuyas.
4. Cuando le pidas a alguien que haga algo, verifica si estás haciendo una
petición o una exigencia.
5. En vez de decirle a otra persona lo que NO quieres que haga, dile lo que
SI quieres que haga.
6. En vez de decirle a otra persona como quieres que sea, dile qué
acciones quieres que haga para que le ayuden a ser de esa manera.
7. Antes de pronunciarte de acuerdo o en desacuerdo con las opiniones de
alguien, trata de conectar con sus sentimientos y necesidades.
8. En vez de decir NO, expresa qué necesidades tuyas te impiden decir
que SI.
9. Si sientes enfado, pregúntate qué necesidad tienes insatisfecha, y qué
podrías hacer para satisfacerla, en vez de pensar qué hay de malo en
los demás o en ti mismo.
10. En vez de alabar a alguien que ha hecho algo que te gusta, demuestra
tu agradecimiento mencionándole qué necesidades ha satisfecho su
acción.
Fuente:
http://www.comunicacionnoviolenta.com
Decálogo para la paz
1. Acéptate tal como eres.
2. Considera que has recibido, con toda probabilidad, más de lo que necesitas. No envidies a nadie.
3. Acepta a los demás tal como son, empezando por los más cercanos: tu familia, tus amigos, tus compañeros, tus vecinos.
4. Aprende a decir y a sentir lo bueno que hacen los demás y dilo en voz alta, sin resentimientos ni temores.
5. No te compares nunca con los demás, pues eso conduce al orgullo o a la desesperación que nunca te harán feliz.
6. Vive sin temor a decir “SÍ” a lo que está bien y “NO” a lo que está mal.
7. Resuelve los problemas y los conflictos con el diálogo y nunca guardes rencor. El rencor te encierra en la tristeza.
8. Empieza a dialogar con lo que nos une y, sólo después, ocúpate de lo que nos divide. Siempre son más las cosas que nos unen que las que nos separan.
9. Da el primer paso, sin esperar a que lo dé el otro, y hazlo antes de que se haga de noche. Que no se ponga el sol sin haber hecho las paces, sin el abrazo de la reconciliación.
10. Ten bien por seguro y por cierto que perdonar y amar es siempre, siempre, más importante que tener razón.